Reseña: Tokyo Ghoul
en November 10, 2022
Finalizada la obra de Sui Ishida, no se puede hablar de Tokyo Ghoul sin hablar de Tokyo Ghoul:re, por lo que hablaremos de ambas obras como lo que son: una sola. Cuando esta parte, Kaneki, protagonista de la obra, declara que: “Si hubiera que escribir una novela conmigo como protagonista, sería sin duda una tragedia” y, lamentablemente, en parte su historia efectivamente se trata de ello, pero quedarnos en que lo es sería hacer una lectura floja de la obra, pues es más bien un camino por y para la resiliencia. Lo anterior se puede ver debido a que, gracias a que es un texto sumamente cuidadoso de sus diálogos, se ve muchísimo el recurso de la introspección de cada uno de los personajes, que si bien la mayoría de ellos se basan en algo trágico para hacer funcionar su historia, siempre dejan ver atisbos de esperanzas y de intentos por poder superarla. Esto invita a ir dejando la tragedia de lado para poder ir preocupándonos de la construcción tanto interna de cada personaje, así como de las relaciones que estos van formando entre ellos, las cuales a pesar de partir como encuentros desafortunados y llenas de sentimientos depresivos, el camino que recorren les podría demostrar que de sus encuentros podría nacer algo de felicidad, a pesar de todo lo malo que vayan dejando atrás.
Tal y como el camino de los personajes es uno lleno de dificultades y prácticamente pensado para el sufrimiento de los mismos, el cual intentarán superar de una u otra forma, a lo largo de la historia no solo leemos la historia de ellos sino que también del mismo autor, ya que con el paso de cada capítulo desde Tokyo Ghoul hasta Tokyo Ghoul:re podemos ver cómo Sui Ishida da un salto gigantesco en su arte, transformando la lectura en un viaje doble haciéndonos testigos tanto del avance artístico como del avance de la trama.
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