Reseñas: Rastros de Sangre
en November 10, 2022
Shūzō Oshimi es unos de los autores más nombrados en la actualidad cuando nos referimos a los y las grandes mangakas de la actualidad, por lo que se nos hacía urgente traerles una reseña de sus aclamadas obras, con el propósito de poder ahondar en el por qué de su éxito. Hoy nos concentraremos en “Rastros de Sangres”, una serie de drama psicológico que aún se encuentra en emisión. Esta obra tiene como protagonista a Seiichi, un adolescente de trece años que vive en una aparente familia perfecta, con una madre sumamente sobreprotectora que, en el momento que él comienza a desarrollar su mundo fuera de casa, empieza poco a poco a desatar conductas inquietantes con el fin de mantenerlo en casa y alejarlo de todo lo que no provenga de ella, llegando a traspasar todos los límites de la sanidad mental.
Una de las cosas más interesantes de esta serie, y de Shuzo Oshimi en general, es que su obra funciona básicamente como novela gráfica, en tanto hay poquísimo texto, pasando a ser las facciones de sus personajes y el ambiente psicológico los que logran transmitir el mensaje de la historia. En dicho ambiente, que expresa por medio de un excelente arte visual, el autor recrea terror y angustia sin recurrir a artificios sobrenaturales y/o externos a la realidad, partiendo por el hecho de que lo relatado es algo propio de esta, pues escribe sobre trastornos mentales y las relaciones desquiciadas que pueden nacer de ellos si estos no son tratados. Con esto, logra abordar relaciones de dependencia, conductas de manipulación y los primeros pasos de la adolescencia de una forma acertada y limpia, aventurándose a representar cosas que no vemos normalmente en otros mangas, como lo son las relaciones de Madre e Hijo y cómo ésta se ve afectada por la carencia de cuidado a la salud mental de cada uno.
Recuerda que puedes encontrar esta historia, que atrapa desde el primer capítulo y que no deja de sorprender con vueltas inquietantes e inesperadas, y mucho más en: www.clubdelgoblin.com
